Morelia, Michoacán, 9 de septiembre de 2024 – A pesar de los esfuerzos recientes para controlar la deforestación inducida por la expansión de huertas de aguacate, el panorama es desalentador. La nueva plataforma de vigilancia satelital, conocida como Guardián Forestal, ha revelado una preocupante magnitud de la destrucción ambiental que se extiende sobre 58 mil kilómetros cuadrados. Aunque el sistema promete detectar y documentar la deforestación en tiempo real mediante imágenes satelitales de alta resolución, el daño ya parece ser irreversible.
La tecnología, financiada en parte por una donación noruega, se presenta como una solución de última hora para un problema que ha sido ignorado durante demasiado tiempo. El programa, que surgió del decreto firmado el 12 de febrero, integra diversas metodologías para rastrear los cambios en la cobertura forestal. Sin embargo, a pesar de contar con datos precisos, la realidad muestra que la deforestación continúa a un ritmo alarmante.
Los ejemplos presentados en Tacámbaro y Morelia ilustran claramente la magnitud del problema. A pesar de tener ahora una base de datos sólida con imágenes de antes y después, la velocidad y escala del desmonte ponen en evidencia la insuficiencia de las medidas implementadas hasta ahora. La deforestación sigue avanzando, y las investigaciones en curso apenas rascan la superficie del problema. La situación plantea serias dudas sobre la efectividad del programa y la capacidad del gobierno para detener la expansión de la industria del aguacate a expensas de los bosques.
