Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich. 23 de junio de 2025.- Con voz firme y sin rodeos, la rectora de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo (UMSNH), Yarabí Ávila González, le cantó claro a los más de dos mil 400 aspirantes que se formaron con nervios y esperanza en el alma para presentar su examen de admisión en el turno vespertino: “Aquí el ingreso va a ser justo, parejo y sin chanchullos”.
La jefa nicolaita se plantó frente a la raza que quiere rifársela en la Máxima Casa de Estudios y los animó con palabras bien directas: “No duden de ustedes, llegaron hasta aquí porque se han fletado. Este momento es importante, y estoy segura de que se han preparado como se debe”.
El encuentro fue una especie de apapacho institucional con mensaje firme: si pasan, es por su chamba, no por palancas. Yarabí no se guardó nada y hasta deseó suerte a toda la banda que se metió de lleno al tiro con el examen.
Después del acto con los chamacos, la rectora se echó un round con los padres y madres de familia. Ahí les soltó que la administración va a estar al tiro para mantener comunicación directa, sin filtros ni rodeos. “Lo que les preocupa, nos interesa. Queremos que la Universidad y las familias caminen juntas, hombro con hombro”, dijo con seriedad.
Por su lado, el mero mero de la Facultad de Ciencias Médicas y Biológicas, Víctor Hugo Mercado, fue claro como agua de manantial: “Aquí nadie se salta la fila. La única llave para entrar es el examen, así que concéntrense y den lo mejor con honor y sin copiarse”.
Así quedó marcado el camino: sin tranza, sin atajos, y con respeto por el esfuerzo. La Michoacana abre sus puertas, pero sólo a quienes se lo ganen. Así, como debe ser.