Por M. Angel Villa Juárez
Morelia, Mich. 13 julio 2025.- Donald Trump volvió a apretar el gatillo en su guerra comercial y ahora le tocó a México. Este sábado, el mandamás de la Casa Blanca anunció con bombo y platillo que a partir del 1 de agosto se aplicará un arancel del 30 % a todos los productos mexicanos que crucen la línea.
¿La razón? Según Trump, es el desmadre del fentanilo, que dijo es culpa del gobierno mexicano por no ponerle freno a los cárteles, a quienes calificó como “las personas más abominables que jamás hayan pisado la Tierra”. Así, sin escalas ni diplomacia.
El aviso llegó en una carta dirigida a la presidenta Claudia Sheinbaum, donde el güero de copete naranja acusa directamente al Estado mexicano y condiciona la revocación del castigo arancelario a que las empresas mexicanas se vayan a fabricar al gabacho.
Pero no paró ahí. También metió presión con amenaza extra: si México se atreve a responder con represalias, subirá el arancel más todavía. “Si combaten a los cárteles y paran el fentanilo, chance y revaluamos”, soltó el republicano como quien da una limosna.
El tiro no fue exclusivo. Ese mismo día Trump también tronó contra la Unión Europea, y ya venía calentando el terreno con Brasil, Japón, Corea del Sur y Canadá. El mensaje es claro: el que no baile al ritmo de Washington, se va directo al paredón arancelario.
Hasta el cierre de esta nota, la presidenta Sheinbaum no había respondido oficialmente, pero el golpe pone en jaque el comercio binacional, y amenaza con pegarle duro al bolsillo de ambos lados de la frontera.
Así que el pleito no es sólo por las drogas, es por el poder, los negocios y el billete, con Trump usando la guerra comercial como garrote político… y México en medio del vendaval.