Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich. 16 de julio de 2025.- ¡Que suene el violín y retumbe el tarímbo! La comunidad indígena de Santa Ana Zirosto, en el municipio de Uruapan, ya anda alistando el jolgorio pa’ celebrar en grande su Tercer Festival de Danzas Tradicionales y Bailes Mestizos, donde el folclor y la raíz se plantan firmes como encino viejo.
El 19 y 20 de julio, el auditorio comunal será territorio sagrado pa’l zapateado, con danzantes y agrupaciones venidas de Michoacán, Jalisco y Nuevo León, que vienen a compartir y presumir sus mejores pasos y vestimentas bien bordadas.
Desde la Secretaría de Cultura de Michoacán (Secum), el jefe de danza Rafael Enrique García Alanís, dijo que este festival no es cualquier pachanga, sino una verdadera fiesta de identidad hecha desde la entraña de la comunidad, y por eso la Secum anda echando el hombro.
El jefe comunal Juan Hermenegildo Mendoza no se quedó atrás y lanzó la invitación abierta a toda la banda, ya que el evento también es parte de las festividades patronales en honor a Santa Ana, la señora que cuida el rumbo.
El maestro Maximino Pérez, líder del grupo Tarhe Purhe, recalcó que su agrupación de 14 danzantes, de todas las edades, ve en este evento un espacio pa’ pasar el fuego de la tradición a las nuevas generaciones.
Y pa’ rematar, el director artístico del evento, Ernesto Sandoval, anunció que no todo será mirar, también habrá talleres de danzas de Tierra Caliente con el maestro Francisco Linares, y un chorro de actividades lúdicas gratuitas pa’ toda la familia, porque aquí el folclor es de todos.
Entre los elencos se lucirán los grupos purépechas:
- Tumbi Sapichus, de Sicuicho
- Tarhe Purhe, de Santa Ana Zirosto
- Thare Uraricha, de Charapan
- Los Kúrpites, de San Juan Nuevo
Y pa’ que no digan que sólo es cosa local, llegan como invitados especiales:
- El Ballet Folklórico Herencia Mexicana, de Nuevo León
- El Grupo Folklórico Itzamatul, de Yahualica, Jalisco
Todo esto, acompañado del son vivo de las orquestas tradicionales de Santa Ana y Santos Reyes. Así que ya lo sabe, si quiere cultura, sabor y un buen motivo pa’ mover el esqueleto, láncese a Santa Ana Zirosto, donde la tradición sigue bailando.