Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich. 07 julio 2025.– Mientras la 4T predica la austeridad y la “justa medianía”, José Ramón López Beltrán, primogénito del expresidente Andrés Manuel López Obrador, se dejó ver echando la hueva a todo lujo en el Vidanta Riviera Maya, un resort de esos que huelen a puro dólar.
El periodista Enrique Hernández Alcázar destapó la movida: dos semanotas en un hotel donde la noche más barata ronda los 9,800 pesos y la más fifí se trepa hasta los 30 mil morlacos. El cálculo rápido: mínimo 137 mil varos por su estancia, y si le metemos spa, comidas gourmet y paseos exclusivos, fácil se arma la cuenta de 400 mil pesos.
Ante el chismerío, el mismísimo José Ramón salió en redes a confirmar que sí, andaba ahí, pero que todo es con lana de su chamba y que él no es funcionario ni maneja recursos públicos. “Trabajo todos los días, no todo se presume, y tener momentos personales no es un lujo, es un derecho”, soltó.
La cosa se calentó porque la escapada de JRLB llega justo después de que su carnal Andrés Manuel López Beltrán, secretario de Organización de Morena, se quejara de espionaje político tras ser captado vacacionando en un hotel de lujo en Tokio, a 7,500 pesos la noche.
Mientras tanto, desde el púlpito guinda, la presidenta Claudia Sheinbaum y la dirigente morenista Luisa Alcalde siguen recordando que en la 4T no hay espacio para excesos ni despilfarros… aunque en la práctica, los juniors de la casa parezcan tener su propio manual de austeridad “con vista al mar”.