Tres canarios se trepan al once ideal de la Liga Expansión MX

Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich. 11 julio 2025.- ¡Ay, papá! En el Coloso del Quinceo se prendieron las luces con más fuerza que nunca, porque tres de nuestros gallos del Club Atlético MoreliaBrian Figueroa, Daniel Parra y Brayton Vázquez— se rifaron como los grandes y fueron reconocidos en el once ideal de la jornada de la Liga Expansión MX. ¡Así como lo oyen, tres joyas morelianas, de esas que hacen que el alma se te enchine en la tribuna!

El partido del pasado fin de semana en el Estadio Morelos no fue cualquier cosa, fue una cátedra de garra, entrega y corazón amarillo-rojo. Los muchachos salieron con todo y se notó desde el primer minuto. El rival ni las manos metió con el baile que les pegaron. Y sí, la afición cantó, gritó y hasta lloró de emoción, porque cuando uno ve a su equipo jugar así, no hay pulmón que no se entregue.

Los tres mosqueteros del Morelia

Brian Figueroa, ese chaparrito veloz, fue el alma del ataque. Traía la pelota pegada al pie como si la amarrara con hilo. Tiró gambetas que rompían caderas y puso pases que parecían servidos con cuchara. Hasta se aventó un golazo que hizo explotar las gradas del Morelos. El morro está en modo fuego.

Daniel Parra, el lateral que sube y baja como diablo con alas, fue un dolor de muelas para los contrarios. No dejó pasar ni el aire por su banda, y cada vez que se fue al frente, levantó el grito de la banda. De esos jugadores que parecen traer batería extra y que contagian con puro coraje.

Y qué decir de Brayton Vázquez, nuestro muro. Ese sí que mete cuerpo, cabeza, corazón y alma. No hubo delantero que se le escapara. Cada jugada suya era como un ladrillo más en el muro que evitó cualquier susto en nuestra área. El tipo es un titán de área chica.

Reconocimiento merecido

Que la Liga Expansión los haya incluido en el once ideal de la jornada no es de a gratis, eh. Es la prueba clarita de que el Atlético Morelia está para cosas grandes, y que estos tres chamacos están dejando el alma en la cancha, defendiendo los colores como se debe: con sangre caliente y la camiseta tatuada en el pecho.

Como buen hincha, uno sabe cuándo el equipo anda bien, y ahorita, créanme, el canario está afinando el vuelo pa’ cosas chonchas. Si siguen así, no hay quien nos pare. ¡Vamos por todo, Morelia, carajo!

Que esto sirva de motivación para lo que viene, porque en el Morelos hay talento, hay hambre y hay corazón. Y como afición, ya estamos listos pa’ seguir alentando con garganta ronca y alma llena.