Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich., 1 de junio de 2025.- A punta de coraje y con el sol apenas asomando, el Instituto Nacional Electoral (INE) dio el banderazo a la elección del Poder Judicial de la Federación 2025. Hoy, 1 de junio, la jornada pinta para larga y accidentada, con 84 mil 123 casillas desplegadas por todo el país, aunque no todas abrieron con puntualidad y varias ni siquiera se instalaron.
De esas, 245 casillas especiales están destinadas para los paisanos que andan fuera de su rancho o de su sección electoral. A eso de las 08:47 de la mañana, la cosa parecía caminar sin broncas mayores, pero no hay que cantar victoria. En los días previos, el INE ya había levantado la mano: 480 casillas fueron canceladas por razones que ya suenan a disco rayado en elecciones mexicanas —inseguridad, conflictos sociales y desorden logístico.
Los estados más golpeados: Guerrero, Michoacán, Chiapas, Oaxaca y Jalisco, donde la democracia llegó con chaleco antibalas. En algunos municipios calientes como Tuzantla y Zitácuaro, en Michoacán, los funcionarios de casilla simplemente no se presentaron. ¿La razón? El miedo no anda en burro, y prefirieron no arriesgar el pellejo.
En otros puntos, el desmadre fue más técnico, como en la zona hotelera de Quintana Roo, donde una casilla especial abrió con media hora de retraso por fallas en el sistema. Nada nuevo, dirían los que ya se conocen de memoria el guion de las elecciones a la mexicana.
Aunque el INE puso cara de póker y trató de mantener la calma, no se puede ignorar el ambiente tenso en varios rincones del país. La gente quiere votar, pero también quiere regresar a casa en una pieza. Mientras tanto, las autoridades llaman a la participación y a confiar en que el proceso se llevará a cabo con legalidad, aunque la realidad en las calles diga otra cosa.
Para esta elección extraordinaria, donde los ciudadanos elegirán a integrantes del Poder Judicial —incluidos ministros, magistrados y jueces—, se espera una jornada intensa, con cifras inéditas de boletas y nombres para escoger, en un ejercicio que muchos todavía no acaban de entender del todo.
Así que ahí va la democracia, caminando con bastón, entre topes, ausencias y el olor de pólvora que no se va del aire. Para seguirle el pulso al día, lo más sano es consultar las plataformas oficiales del INE o medios confiables, porque en México, hasta el último voto cuenta… y a veces ni eso.