Por M. Angel Villa Juárez
Morelia, Mich., 17 de junio de 2025.- La cosa se puso brava en Medio Oriente: desde la madrugada de este martes, misiles iraníes llovieron sobre Israel y uno de ellos le pegó de lleno a un edificio del Mossad en Herzliya, ciudad pegadita a Tel Aviv, según soltaron los medios iraníes Tasnim y Fars.
De acuerdo con los informes, el edificio alcanzado podría ser un centro logístico del servicio de inteligencia israelí, y tras el impacto, el inmueble ardió en llamas como si fuera película de acción, solo que acá la sangre es real.
Los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) no se anduvieron por las ramas y confirmaron el golpe contra un centro de inteligencia militar llamado Aman y otro contra un centro de planeación de operaciones del Mossad en pleno Tel Aviv. Todo esto, dicen, fue una respuesta directa a las tensiones que siguen subiendo como espuma entre ambos países.
Medios israelíes también traen su propia versión y reportan una tanda de ataques con misiles. Ynet, por ejemplo, soltó que un estacionamiento de autobuses fue bombardeado en Herzliya, dejando un cráter de cuatro metros de hondo y al menos 15 unidades calcinadas o dañadas, además de un buen susto generalizado.
Videos difundidos por prensa iraní muestran cómo los misiles hicieron blanco sin que los sistemas antiaéreos pudieran atajarlos. Aunque se dispararon más de diez misiles antiaéreos, los iraníes dicen que los suyos pasaron como cuchillo caliente en mantequilla.
El mundo entero aguanta la respiración, porque cuando dos potencias con rencillas largas se tiran con todo, el que paga los platos rotos casi siempre es el pueblo. La pregunta ahora es: ¿se viene la escalada o ya se están dando con todo?