Por M. Ángel Villa Juárez
Morelia, Mich. 23 de junio de 2025..- Mil 771 millones de pesos suenan bonito en papel, pero en Villas del Pedregal la pregunta flota en el aire: ¿y a quién le preguntaron pa’ hacer todas esas obras? Porque mientras el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla presume una “inversión histórica” para transformar esta zona popular de Morelia, nadie ha visto una sola asamblea vecinal, ni consulta barrial, nomás se escuchan discursos desde el estrado.
Según lo dicho en rueda de prensa, el billete está cayendo en obras de salud, educación y conectividad carretera. Muy bien, dicen algunos. Pero otros vecinos se preguntan si estas decisiones salen del sentir del pueblo o de las ideotas que se avientan en las oficinas del gobierno estatal.
Ahí está el Icatmi con su centro de capacitación pa’ choferes de carga pesada (Cetransporta), que suena útil, pero no todos ven claro pa’ quién va. ¿Había demanda real en la colonia o fue más bien un proyecto armado desde el escritorio?
Lo mismo pasa con las escuelas nuevas —como el preescolar “Rita Centina” y la primaria “Rafael C. Haro”—, la secundaria en obra negra (que dicen va al 60 %), el puente Paso Catrinas y la glorieta rehabilitada. ¿Los vecinos las pidieron? ¿O fue el clásico “ustedes ni pregunten, nosotros sabemos lo que les conviene”?
También se está construyendo la vía San Nicolás Obispo–Villas del Pedregal y un tramo del segundo anillo periférico rumbo a Pátzcuaro. Proyectos de alto impacto, sin duda. Pero otra vez: ¿consultaron a las familias afectadas, a los que viven a pie de obra, a quienes usan esas rutas todos los días?
Y mientras en el boletín oficial todo suena bien bonito, en las calles se escucha otra historia: colonias con servicios a medias, transporte que no alcanza, inseguridad al acecho y viviendas que se caen solas. Porque sí, Villas del Pedregal es uno de los fraccionamientos más grandes de Morelia, pero también uno de los más abandonados… hasta que se volvió jugoso para proyectos de relumbrón.
El dinero no cae mal, pero la dignidad empieza por preguntar, y hasta ahora, nadie ha visto una encuesta, una reunión abierta o un simple volante de invitación vecinal. La banda quiere saber: ¿la inversión es para mejorar la vida o sólo para tomarse la foto?