Morelia, Mich. 15 de agosto 2023.- En la última década, la proliferación de cigarrillos electrónicos o vaporizadores, conocidos como vapes, ha ganado una significativa popularidad. No obstante, es esencial comprender que, al igual que los tradicionales cigarrillos, estos dispositivos no están exentos de consecuencias perjudiciales para la salud.
Este hecho quedó demostrado en el impactante testimonio del luchador profesional Sean Tobin, quien a los 20 años presentó las consecuencias que el uso constante de vapes tuvo en sus pulmones, un testimonio que se puede describir como escalofriante.
Tobin, un artista de artes marciales mixtas de Estados Unidos, reveló el asombroso deterioro de sus pulmones debido a su consumo de vaporizadores. Su historia comenzó en 2018, cuando tenía tan solo 15 años, y se inició en el consumo de nicotina a través de cigarrillos electrónicos.
Aunque estos dispositivos a menudo se promocionan como alternativas más seguras a los cigarrillos convencionales, Tobin se mantuvo leal a su práctica de vapeo durante cinco años. Fumaba con regularidad desde el amanecer hasta el anochecer, lo que resultaba en una exposición constante a los químicos presentes en los vapes.
La historia de Tobin se volvió pública cuando brindó una entrevista al medio Mirror, en la que compartió cómo un dolor muscular lo llevó al hospital. Sorprendentemente, este dolor estaba relacionado con el colapso de su pulmón derecho, una consecuencia directa de su extenso historial de consumo de vapes.
Tras realizar exámenes médicos, los resultados revelaron el colapso del pulmón derecho de Tobin. Fue necesario trasladarlo de urgencia al hospital para someterse a un procedimiento que liberara el aire acumulado en su pulmón y cavidad torácica. A pesar de los intentos iniciales de tratamiento, su pulmón no mostró signos de recuperación natural después de dos días, lo que condujo a una intervención quirúrgica.
La experiencia resultó aterradora para Tobin, quien confesó haberse sentido responsable de su propia condición, considerando que años de vapeo habían deteriorado sus pulmones. La radiografía confirmó el colapso pulmonar, dejando claro que el vapeo había tenido un profundo impacto en su salud pulmonar.
La cirugía a la que Tobin fue sometido incluyó la adhesión del pulmón afectado a la pared torácica, con la finalidad de prevenir futuros colapsos. Las imágenes perturbadoras capturadas antes de la cirugía a través de un endoscopio revelaron una superficie pulmonar cubierta de puntos oscuros, que según Tobin, eran acumulaciones de carbón derivadas de años de intenso vapeo.
Los médicos confirmaron que el vapeo probablemente había sido la causa detrás del colapso de su pulmón. La visión de las imágenes que mostraban el daño causado resultó impactante para Tobin, quien se sorprendió debido a su historial de salud envidiable. Hasta antes de la afección, Tobin solía entrenar intensamente como luchador de artes marciales mixtas, lo que lo hace resaltar la paradoja entre su apariencia saludable y los daños internos causados por el vapeo.
Este relato ilustra cómo, a pesar de las apariencias modernas y la variedad de sabores atractivos, los dispositivos de vapeo pueden tener consecuencias negativas profundas en la salud, especialmente cuando se usan en una etapa temprana de la vida. Sean Tobin se convierte en un testimonio vivo de los riesgos que estos dispositivos conllevan para la salud pulmonar, resaltando la importancia de una toma de conciencia sobre los efectos a largo plazo del vapeo.