Violación del debido proceso y abuso de poder en el caso de la comandante Chuy

Por el Lic. Alberto Moreno Zamudio
En toda mi vida de jurista y abogado, jamás he entendido a los gobiernos que hemos tenido en Michoacán, y menos a los que llegaron con morena, que han permitido la destrucción de monumentos históricos, edificios públicos, daños a patrimonio resguardado por el INAH, cada 8 de marzo desde su llegada, como si fueran pagados por lo que queda de la oposición, o de los actos vandálicos de los terroristas, (normalistas), que han ocasionado que varios policías resulten lesionados, o con pérdida de un ojo, oído o extremidad, por el lanzamiento de petardos, vehículos, bombas Molotov, que han secuestrado, robado mercancías y vehículos, quemado autobuses, y por increíble que parezca ni uno solo en la cárcel.
Cómo si los empresarios transportistas lo consintieran o estuvieran amenazados por estos grupos de que si denuncian les roban más unidades o les queman más unidades, tal parece que son grupos pagados por el propio gobierno para desviar la atención de su pésimo desempeño y que incluso cuando se han excedido en la comisión de delitos, el propio gobierno del Estado paga las finanzas y ordena el archivo de los procesos y no pasó nada.
Pero que una mujer policía alzo la voz, hizo uso de la facultad constitucional de manifestarse y exigir mejores condiciones laborales aquí si ardió Roma, aquí si todo el peso de la ley, por el simple hecho de que llegó uniformada, y estacionó la patrulla a su cargo para cerrar la circulación, ese fue su crimen, portar el uniforme que le corresponde, y haber llegado en la patrulla, por ese hecho se le quiere fincar responsabilidad penal por sabotaje, que estupidez, y que estupidez de autoridades tenemos, por eso es que no me preste a la farsa de la elección para juez o magistrado, por la simple y sencilla razón que yo no obedezco órdenes de nadie, que si se que algo está mal, no lo hago, que si se que una Ley está mal, la combato jurídicamente con argumentos y fundamentos.
Ahora resulta que la comandante Chuy que no incito al paro, que no incito a la violencia, que no tomó las armas, que no realizó ningún disparo, que no quemó ninguna patrulla, a ella si le quieren aplicar todo el peso de la ley, y la juez que lleva el caso si se presta a este abuso de poder, debe ir pensando en su retiro del poder judicial.
Lo mismo el otro adorno de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, que hace tres semanas fue a exigir la entrega de los 3 normalistas que quemaron y robaron vehículos, e hizo nada para liberar a Chuy.
¿Dónde están las “feministas” del 8 de marzo?, ¿dónde están los derechos humanos para Chuy?, para mí no existen pruebas que impliquen a la Comandante Chuy a lo que está viviendo, claro está que buscan dar un escarmiento a los policías que se manifiesten en días de trabajo, armados y con el uniforme.
Que mal que al día de hoy no haya unión entre los policías para exigir la libertad de Chuy, sobre todo aquellos que han perdido un oído, un ojo, una extremidad, en el cumplimiento del deber, y ver cómo dejan libres a los delincuentes a las pocas horas, ahora más que nunca tienen un motivo, una causa más para luchar, hoy es Chuy, mañana todo aquel que exija mejores condiciones de trabajo, uniformes, salario digno, seguro de vida, equipo táctico, chalecos blindados de calidad, etc, etc.